Fin de la Semana Santa en Euskadi y los detallistas volvieron a colapsar las entradas de Mercabilbao para hacer sus compras de frutas y hortalizas. Los detallistas tienen una hora desde que entran hasta que salen desde el periodo Covid 19.
Aunque la dinámica de ventas ha descendido, lo ha hecho mucho menos en frutas y hortalizas con respecto a pescados y carnes. Los detallistas han elevado sus demandas en naranjas, mandarinas, limones, manzanas y plátanos en el capítulo de frutas y en patatas, lechugas, tomates, pimientos y coliflores en la gama hortícola.
El flujo ha mejorado, sobre todo, desde que se puso en marcha el servicio por teléfono para que los detallistas adelanten la ‘comanda’ y sólo acudan al mercado para recoger las cajas y salir a sus puntos de venta.
Las colas también se han producido porque los detallistas saben que entrar de los primeros te da la opción de la elección de las partidas por calidad, calibres u orígenes, mientras que «llegando al final de la jornada sólo puedes adquirir los restos», señala un detallista.
Y es que con el sistema de una hora para comprar y cargar, los detallistas cargan rápido y bastante para no tener que acudir a diario y «cuando hay una partida con buena relación calidad-precio desaparece rápidamente», señalan los detallistas que acuden a Mercabilbao.
