La cadena de supermercados Lidl prevé adquirir unas 125.000 toneladas de tomates españoles en 2023, de las que destinará el 80 % a exportación, en concreto, en sus otros más de 11.500 establecimientos en una treintena de países.
En un comunicado, la cadena de supermercados ha señalado que Andalucía y la Región de Murcia son las comunidades autónomas que concentran la mayoría de estas compras.
Con esta previsión de compras, sumarán unas 500.000 toneladas de tomates de origen nacional en apenas cuatro años, con lo que busca «afianzar su posición como cliente número uno de la huerta española y plataforma de referencia para el desarrollo de negocio de cientos de proveedores».
En función de la época del año, Lidl comercializa distintas variedades de tomates como rama, cherry, tomate pera, Kumato o incluso referencias BIO, ha añadido.
En 2022, la compañía compró fruta y verdura en España por valor de unos 2.700 millones de euros.
Ha recordado también su «firme compromiso» con la sostenibilidad, pues es junto a GlobalGAP el primer estándar europeo para la preservación de la biodiversidad en el cultivo de frutas y verduras.
