En esta primera sesión del foro, marcada por los hábitos alimentarios adquiridos durante el confinamiento por la pandemia Covid-19 y tras él, se valoró positivamente la evolución durante este año del consumo de frutas y hortalizas, a pesar del leve descenso experimentado en verano tras el confinamiento, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La Fundación Dieta Mediterránea ha destacado la necesidad de mantener un estilo de vida saludable, hecho cada vez más tangible que influye de manera especial en nuestra alimentación.
Adoptar una dieta sana y equilibrada, basada en el consumo de frutas y verduras frescas, tal y como refleja la pirámide de alimentos de la Dieta Mediterránea, es la opción elegida cada vez por más personas en el mundo para combatir epidemias tan serias como la obesidad y prevenir problemas de salud como la diabetes, colesterol, hipertensión o complicaciones cardiovasculares. y verduras frescas, tal y como refleja la pirámide de alimentos de la Dieta Mediterránea, es la opción elegida cada vez por más personas en el mundo para combatir epidemias tan serias como la obesidad y prevenir problemas de salud como la diabetes, colesterol, hipertensión o complicaciones cardiovasculares.
El Dr. Ramón Estruch, coordinador científico de la Fundación Dieta Mediterránea, explicó que en la actualidad existen estudios que recomiendan el consumo de diez raciones de fruta y verdura al día, en raciones pequeñas de 80-100 gramos, “para expresarlo de una forma más fácil, es recomendable que la mitad de lo que comemos cada día sea fruta y verdura, esto nos permitirá mantener una alimentación saludable y prevenir enfermedades”. Esta ingesta tiene importantes beneficios para el organismo.
Las frutas y hortalizas contienen nutrientes esenciales para el organismo, tienen un alto contenido en fibra, vitaminas, minerales, agua y compuestos antioxidantes y antiinflamatorios, no contienen colesterol y aportan pocas calorías. Es mejor comer la fruta cruda y entera y la verdura, cocinada con aceite de oliva virgen extra. En el foro también se habló de la importancia de consumir el producto de calidad, sostenible y de proximidad. En este sentido, es importante ingerir frutas y verduras de temporada con más sabor, porque la que tienen más sabor tiene factores más saludables.
También es importante animar a los restaurantes que en sus cartas gastronómicas apuesten por incluir el origen de dichos productos y en su oferta de postres nunca falte la fruta fresca. Así como realzar la labor de toda la cadena del sector: productores, industrias, distribución y hasta gastronomía y la medicina. En esta primera parte del foro “Frutas y Verduras. Gastronomía saludable” participaron el Dr. Ramón Estruch, Coordinador Científico de la Fundación Dieta Mediterránea; Carmen Urbano, Directora General de Promoción e Innovación Agroalimentaria del Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón; Carlos Echeveste, Director Comercial de Frutaria; Javier Berdejo, de Frutas Berdejo; Miguel Ángel Alonso, responsable de frutas y verduras de Carrefour Zaragoza; Manel García, delegado en Aragón de la Asociación Europea de Cocineros – EUROTOQUES; Elisa Plumed, presidenta de la Asociación de Periodistas Agroalimentarios de España-APAE; y Domingo Valiente, Director Ejecutivo de la Fundación Dieta Mediterránea.