La superficie cultivada de patata en la Unión Europea (UE) ha caído más del 50 % desde el año 2000, según los datos de Eurostat hechos públicos por Europatat. De este modo, en 2023, la UE sumó 1,3 millones de hectáreas.
El descenso ha sido especialmente acusado en Polonia, con una caída de casi el 85 % en este tiempo. Mientras tanto, y a pesar de la reducción de hectáreas, Alemania, Francia y Países Bajos continúan siendo los principales productores UE, con más de la mitad del total europeo.
El mercado intracomunitario de patata sumó 9 millones de toneladas en 2023 por valor de 3.000 millones de euros; mientras que los envíos fuera de la UE alcanzaron los 1,1 millones de toneladas y 663,6 millones de euros.