Sin embargo y a pesar de que El Corte Inglés volviera en su ejercicio fiscal de 2019 a los niveles de ganancias de 2010, al obtener 310 millones de euros, una cifra un 20 % superior a la de 2018 y similar a la de hace diez años, cuando el grupo alcanzó un beneficio de 319,4 millones, el consejo de administración ha decidido proponer a sus accionistas un recorte del 50 % en su retribución debido a la situación generada por el coronavirus.
Las tiendas de El Corte Inglés, a excepción de los espacios destinados a alimentación, estuvieron cerradas más de dos meses tras el decreto de estado de alarma por la pandemia decretado por el Gobierno el 14 de marzo.
Esta situación llevó a El Corte Inglés a tener que aplicar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que afectó a cerca de 26.000 trabajadores de los 90.000 que componen la plantilla del grupo, el 28,7 %.
De ese total de trabajadores afectados, unos 22.000 pertenecían al gran almacén (el 33 % los 65.000 que integran la plantilla, según fuentes sindicales).
Por tanto, El Corte Ingles repartirá un dividendo de 37,5 millones de euros, la mitad de los 75 millones del año pasado.
El desembolso en 2019 de 75 millones fue un 22 % superior al de 2018, cuando se repartieron 61 millones de euros.
