Udapa ha superado las 350 hectáreas de cultivo propio en Álava esta campaña, tanto de patata para consumo como la que se empleará como semilla. Así lo ha afirmado la cooperativa en un comunicado, en el que detalla que, una vez finalizada su campaña de siembra de patata, han incrementado su superficie en un 10,5 %.
“A pesar de todos los obstáculos que está atravesando el sector agrícola en la actualidad, el acompañamiento directo, continuo e innovador que hacemos desde Udapa a los productores durante todo el proceso de producción nos ha ayudado a aumentar el número de socios de la cooperativa, así como a incrementar nuestra extensión productiva”, asegura satisfecho Alfonso Sáenz de Cámara, director general de Udapa.
Esas más de 350 hectáreas se destinarán a la multiplicación de algunas variedades que ya se han convertido en clásicas dentro del territorio alavés, como son Monalisa, Lucinda o Agria. Pero al mismo tiempo también se apostará por la producción de otras que por ahora no son tan comunes en tierras alavesas, como pueden ser la variedad Amandine, Edurne o Beltza.
“Desde Udapa seguimos impulsando la obtención de estas nuevas variedades porque creemos que se adaptan mejor a nuestros campos de cultivo, a los cambios meteorológicos y, sobre todo, a las demandas del mercado”, explica Sáenz de Cámara.
Control de plagas y enfermedades
Un clima acorde a la estación primaveral ha posibilitado que las siembras se realizaran a tiempo y con buen tempero, por lo que desde la cooperativa confían en que esta sea una buena campaña de producción.
“Todavía es pronto para aventurarse a dar un pronóstico fiable, pero las lluvias de mayo han terminado de llenar las balsas de regadío, y si durante el verano no tenemos grandes olas de calor todo hace indicar que la cosecha de septiembre será excepcional”, comenta Sáenz de Cámara.
Para que las producciones tengan un rendimiento adecuado, desde el Departamento de Innovación de la cooperativa están participando en varios proyectos buscando nuevos métodos sostenibles para el control de plagas y enfermedades de la planta de la patata. Uno de esos ensayos se enmarca dentro del ámbito de la producción de patata de siembra y pretende controlar la transmisión de la virosis a través del pulgón.
Así, según la directora del Departamento de Innovación, Ana Carrasco, por un lado, se está estudiando la efectividad del ‘mulching’ o esparcimiento de paja en el momento de la siembra, con el objetivo de no hacer visibles las plantas de patata a los pulgones y prevenir de esta forma la virosis en el cultivo. Mientras que, por otro lado, se analizará el rendimiento de la utilización de mallas anti-pulgón en la producción de patata de siembra de categoría prebase.
En definitiva, que gracias a este tipo de proyectos y estudios, Udapa no solo está generando un valor diferencial, sino que también está ayudando al sector agrario a hacer frente a los desafíos que se le presentan.