Latinoamérica

Productores hortícolas de Paraguay exigen frenar el contrabando de tomates

Cientos de productores hortícolas de Paraguay se manifestaron este jueves por las calles de Asunción para exigir a las autoridades frenar el contrabando de tomates de Argentina y Brasil, lo que aseguran que ocasiona graves pérdidas al sector en la actual época de cosecha.

Cerca de medio millar de agricultores amanecieron en la explanada de la Catedral Metropolitana antes de marchar por la zona céntrica de la capital hacia la base del Comando de la Armada, organismo encargado del control fronterizo sobre el río Paraguay.

Los productores se movilizaron con carteles y pancartas ante el edificio, ubicado en la zona portuaria de Asunción, donde repudiaron el «nulo control al contrabando».

Francisco Daniel Meza, presidente de la Unión Nacional de Productores Frutihotícolas del Paraguay, explicó a Efe que actualmente hay 300.000 kilos de tomate sin comercializar «que se están pudriendo» a causa de la entrada ilegal de productos hortícolas al país.

«El problema que tenemos en este momento es que no podemos comercializar nuestro producto. Está permitido la invasión a nuestro país de productos de contrabando, especialmente frutihortícolas porque nuestras autoridades no hacen nada», expresó Meza.

El dirigente responsabilizó de este flagelo de la economía local a la Marina, en especial a su comandante, quien «no hace su trabajo» y deja pasar cargamentos ilegales desde la vecina localidad de Clorinda o desde Formosa, capital del provincia argentina del mismo nombre.

En sus fincas, los granjeros reciben 1.500 guaraníes (0,24 dólares) por cada kilo de tomate por parte de los intermediarios, que los venden posteriormente a unos 5.000 (0,81 dólares) en los supermercados, mientras que el consumidor final llega a pagar hasta 9.000 guaraníes (1,46 dólar) por ellos.

Meza sostuvo que los productores, organizados en dos grupos localizados en los departamentos de Caaguazú, Cordillera, Central, Alto Paraná e Itapúa, cosechan al año unos 65 millones de kilos de tomate con los que se pueden cubrir toda la demanda interna.

«Hay un consumo diario de 250.000 kilos en nuestro país (y) nosotros no vendemos, pero se cubre esa demanda ¿Cómo se cubre? con productos de contrabando», dijo el agricultor, al tiempo de advertir que los bloqueos de carreteras como medida de protesta seguirán si no se toman medidas contra el ingreso ilegal.

Desde la semana pasada, productores de Caaguazú llevan a cabo cierres de la Ruta 2, a mitad de trayecto entre Asunción y Ciudad del Este, en la frontera con Brasil, exigiendo acciones por parte del Ministerio de Agricultura contra el contrabando, alentado por las variaciones cambiarias en Argentina y Brasil.

Paralelamente a la concentración de los productores, el Gobierno habilitó este jueves ferias en varias plazas públicas de Asunción, como medida para estimular la venta de tomates, que aglutinaron filas de personas en el centro de la capital.