Los trabajadores de la cadena Asda se muestran inquietos durante estos días por las condiciones que la distribuidora quiere imponer. El sindicato GMB ha pedido a Asda a negociar los cambios en los contratos que eliminan los incentivos durante las pausas para comer y reducir el trabajo durante los días festivos.
60.000 operarios son los afectados, que ven como su salario se sitúa en los 10 euros por hora. Estas nuevas condiciones eran voluntarias hasta la fecha, pero Asda quiere imponerlos para ganar cuota de mercado y competitividad frente a otros grupos de la distribución.
Asda no quiere ni citarlos, pero el crecimiento de Lidl y Aldi le quita miles de consumidores a Asda y la cadena ‘discount’ quiere mejorar su competitividad a base de ser más eficaz con los trabajadores y recuperar varios días festivos. El nuevo contrato ‘flexible’ que lanzó Asda hace dos años ha sido rechazado por el 60 por ciento de los trabajadores, según el comunicado lanzado por el sindicato GMB.
El sindicato ya le ha dicho a GMB que Asda no va a imponer los nuevos contratos, y «esperamos que Asda se siente a negociar, ya que si extienden el nuevo contrato, antes deben escuchar a sus empleados y sentarse con nosotros para debatir y negociar sobre las condiciones y términos del nuevo contrato», señalan desde el sindicato.
El grupo GMB no habla ni de movilizaciones ni de huelgas pero advierte que «los usuarios de nuestro sindicato y los empleados de Asda están ansiosos e inquietos por el anuncio de Asda y no son las mejores condiciones para trabajar».