Almería, Granada, Málaga y Huelva son las cuatro provincias con mayor peso en la horticultura andaluza y para la industria hortofrutícola se ejercen su punto de presión saber quiénes van a ocupar las carteras y responsabilidades en las delegaciones de Agricultura.
Almería siempre es el foco de atención, ya que es la provincia donde el agro aporta más al PIB provincial y al PIB regional con una vinculación internacional única entre el resto de las provincias andaluzas. La actual delegada de Agricultura, Aranzazu Martín, no estaba en ninguna de las quinielas. Es persona de máxima confianza de la consejera andaluza Mari Carmen Crespo y su bagaje agro es desconocido, aunque desde la Junta de Andalucía se apunta que obtuvo el Diploma de Estudios Avanzados en Derecho Agrario. Durante el periodo que fue Parlamentaria andaluza fue portavoz de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Grupo Popular, y hay que señalar que la Consejería de Agriculltura tiene a partir de ahora responsabilidades en materia medioambientales.
El sector hortícola almeriense no ha puesto reparos a su designación y desde fuentes de Coexphal ya se apunta abiertamente el interés de estar junto a la nueva delegada.
María José Martín Gómez es la nueva cabeza visible de la Consejería del agro andaluz en Granada. Nacida en Baza en 1975 está más ligada al escenario de la sostenibilidad, ya que participó en la Comisión Mixta de Estrategia Sostenible de España.
El nuevo delegado de Agricultura de Huelva, Alvaro Burgos, es el más trabajado en las labores agrarias, ya que fue delegado de las Areas de Agricultura y Economía del Ayuntamiento de Moguer durante los años 2003 a 2011. Moguer es uno de los municipios de referencia para el cultivo de la fresa.
El delegado de Agricultura de Málaga, Fernando Fernández-Tapia Ruano, es el que menos experiencia tiene en labores agrarias. Es Licenciado en Derecho y alcalde de la localidad de Coín, cargo que deja, aunque ya había comentado en varias ocasiones su intención de no repetir.
