Lidl invertirá 110 millones de euros este año en la puesta en la construcción de un nuevo centro logístico en Loures (Portugal), con el objetivo de promover una mejor oferta de tiendas en esta región.
Estas nuevas instalaciones contarán con unos 54.000 metros cuadrados y una capacidad de almacenamiento de más de 40.000 palets. Según ha informado la cadena de supermercados en un comunicado, estarán dotadas de las herramientas “más eficientes del mercado y soluciones de confort de trabajo y operaciones de última generación”.
Con su puesta en marcha, Lidl prevé crear más de 200 nuevos puestos de trabajo en la zona.
Estrategia sostenible
El futuro almacén estará equipado con un sistema de gestión energética que, aprovechando la luz solar incidente, gestiona las necesidades de energía artificial en el interior, permitiendo la reducción del consumo de energía.
También dispondrá de paneles fotovoltaicos para la producción de electricidad, suficientes para proporcionar el equivalente al consumo de 800 hogares durante un año; cargadores para vehículos eléctricos; sistemas de recolección y uso de agua de lluvia; cámaras frigoríficas que utilizan gases naturales que minimizan los efectos nocivos sobre la capa de ozono, sistema HVAC integrado en el sistema de refrigeración industrial, reutilizando la “energía” liberada y generalmente desperdiciada en este tipo de sistemas.
El edificio contará con la certificación BREEAM, que clasifica los edificios sostenibles.
Durante la ceremonia de colocación de la primera piedra, Milton Rego, administrador de Infraestructura y Expansión de Lidl Portugal, afirmó que “el terreno elegido tiene una ubicación privilegiada y estratégica para el crecimiento de nuestro negocio, que nos permite servir mejor a la comunidad. Junto con nuestros socios, daremos a luz a otro punto de referencia logística en Portugal”.