La producción andaluza de mango 2023 se desplomó en un 44 por ciento con respecto a los datos de 2022 y se quedó al 42 por ciento del potencial productivo andaluz, que ronda una media de 40.000 toneladas.
La producción se situó en 16.896 toneladas en una superficie que no ha cambiado, ya que los empresarios tienen confianza en las posibilidades de esta fruta tropical.
La superficie andaluza está en 5.050 hectáreas, de las que 4.548 hectáreas se encuentran en Málaga y el resto en la costa de Granada.
La sequía y los golpes de calor del verano condicionaron la campaña y los programas con las cadenas europeas, que desde la semana 34 hasta la 41 suele manejar la oferta andaluza con soltura.
Pero durante esta campaña, ninguna cadena quebró sus programas con el mango de ultramar, ante la evidente falta de suministro.
La oferta empezó a estar presente en el mercado a partir de la semana 33, una semana adelantada por las altas temperaturas, y finalizó en la semana 41, una semana antes de lo normal ante la falta de oferta.
Los precios muy altos, porque «aunque con disponibilidad limitada, la calidad de la fruta fue muy buena y con calibres comerciales demandados por los mercados europeos», expone el Observatorio de Precios y Mercados de la Junta de Andalucía.
Los calibres menos comerciales también encontraron acomodo en Portugal, y por este motivo lideró las compras internacionales durante 2023 al acaparar el 38 por ciento de las expediciones internacionales, aunque Francia fue el destino que mejor pagó la fruta andaluza.
Los mercados
Andalucía exportó más de 13.000 toneladas durante la campaña pasada, cifra muy inferior a las 31.000 toneladas de 2022. El valor económico global también se desplomó y se quedó en los 29 millones de euros frente a los 52 millones de euros de 2022.
Portugal fue el mercado que más mango absorbió -38 por ciento- pero Francia lideró el negocio internacional al acaparar el 31 por ciento del negocio generado por las exportaciones andaluzas, frente al 27 por ciento de Portugal.
Alemania y Países Bajos fueron los otros dos mercados que capitalizaron cantidades de referencia. Alemania se hizo con el 12 por ciento de las exportaciones y con un buen precio de referencia y Holanda adquirió el 7 por ciento de las expediciones con unas liquidaciones más estandarizadas.
Las liquidaciones
Las liquidaciones fueron más generosas por cada mango comercializado y alcanzaron los 1,81 euros por kilogramo, la mayor cantidad desde que existen registros históricos.
Las liquidaciones llegaron hasta los 2,24 euros por kilogramo en variedades muy específicas y alcanzaron los 1,77 euros en la gama Osteen y los 1,75 euros en la Keitt. Liquidaciones muy atractivas y muy por encima de la campaña pasada que fueron de un euro para Osteen y menos de 90 céntimos para Keitt.
