La Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía que dirige la almeriense Carmen Crespo no ha sido generosa con los horticultores afectados por el temporal de la Dana del pasado mes de septiembre y en la reunión tenida esta mañana en Campohermoso (Níjar) sólo quedaron 20 de los 120 que acudieron a primera hora de la mañana.
Hay decepción, enfado y mucho malestar con el Gobierno andaluz de Juan Manuel Moreno Bonilla y con su consejera Mari Carmen Crespo. Y es que para recibir cualquier tipo de ayudas tendrás que tener los horticultores afectados el 30 por ciento del total de sus explotaciones invernadas. Es decir un agricultor «con cinco hectáreas invernadas de las que una está en Níjar y cuatro en el Poniente, no recibiría nada si al menos tuviese afectada 1,5 hectáreas.
Esta ha sido la primera criba que provocó mucho malestar entre los horticultores y provocó que el 50 por ciento de la sala se levantase, ya que «las condiciones no se ajustan a la realidad. Al PP le han metido un gol», señalaba Paco Trujillo, horticultor de Níjar.
El enfado y la desilusión fue en aumento cuando se expusieron algunos cambios como la de una productora que tuvo que levantar el muro de la rambla que linda con el invernadero, porque se había quedado colgando y levantarlo de su bolsillo. Esta inversión no es reconocida por la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía por no haber sido comunicada, pese a que los funcionarios de la Consejería acudieron a ver la finca y pudieron comprobar que una parte del invernadero estaba en el aire por el arrastre de la tierra. Por un defecto de forma esta agricultora, que ha gastado 3.000 euros, no recibirá nada.
Algunos horticultores llegaron a decir que de los casi seis millones de euros «no van a gastar nada porque las condiciones no se ajustan a la realidad y se establece un criterio injusto, propio de gente y políticos que no sufren ni conocen la realidad de un invernadero y del campo. No se puede tener un invernadero sin preparar durante seis meses, hasta que haya una resolución. ¿De qué comemos y cómo pagamos los impuestos para pagar sus grandes sueldos?», preguntaba José Salguero de Níjar.
Las ayudas para los «afortunados» irán de entre 6-8 euros por metro cuadrado en el caso de un plano y 8-10 euros por metro cuadrado para un raspa y amagado, y siempre que el invernadero tenga un 15 por ciento de la superficie dedicado a la ventilación y que cumpla con la orden de virosis.
La delegada de Agricultura en Almería, Aránzazu Martín, y la alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez, estuvieron en dicho acto informativo celebrado en la mañana de hoy en el Palacio de Congresos de Campohermoso.