El mayor grupo productor de frutas y hortalizas de Italia -Apofruit- cerró el ejercicio 2018 con una facturación de 326 millones de euros, lo que supone un incremento del cuatro por ciento con respecto al ejercicio anterior. A los socios productores se les liquidó en torno a los 60 céntimos de euro por kilogramo, lo que supone 11 céntimos más que en 2017.
Esta diferencia se debió a que la campaña de verano fue nefasta en lo productivo pero altamente rentable en lo económico. Desde la dirección de Apofruit se señala que «se trabajó duro para consolidar los resultados y mantener los niveles de eficencia», apunta Ilenio Bastoni, director general de la firma italiana.
Apofruit incrementó su volumen de oferta en 2.100 toneladas a pesar de que el verano fue especialmente complicado por la ola de calor. El incremento se debió a la fruta de invierno en donde Apofruit se ha hecho especialmente representativo en kiwi con más de 300.000 toneladas o en manzana con 320.000 toneladas en bio y convencional. La fruta de invierno representa actualmente el 58 por ciento de las ventas de Apofruit y es donde la cooperativa italiana se quiere hacer más presente en los mercados nacionales e internacionales tanto en convencional como en biológico.
El crecimiento de Apofruit se ve acompañado de un escenario realmente complejo, ya que «los mercados no terminan de elevar el consumo de frutas y hortalizas y las exportaciones se complican y tenemos que pelear con unos costes que están muy por encima de la de nuestros competidores», señala Bastoni.
