La firma italiana Apofruit ya ha adelantado sus expectativas para el ejercicio 2020. No son unas expectativas muy agresivas y la empresa espera cerrar el ejercicio en los 330 millones de euros. Es el presupuesto que presentó ayer a su Junta de Accionistas para su aprobación y en la que incorpora un esfuerzo en innovación para elevar el volumen de negocio.
Una expansión del negocio que no es especialmente fuerte, ya que el presupuesto presentado durante la campaña pasada fue de 326 millones de euros. Este año la empresa tiene varias líneas novedosas como Violi, nacido de una colaboración en la red de empresas con Cericola y La Mongolfiera, lo que «demuestra el dinamismo del sector», señala Mirco Zanelli, director comercial de Apofruit.
La firma está más centrada en la gama bio y «en gran crecimiento a través de Almaverde Bio y la marca Verdea para biodinámica. También es estratégico el papel de las marcas de distribuidor, donde Apofruti expone sobre el 60 por ciento de su facturación. Aunque la empresa no renuncia a sus marcas de referencia como Solarelli, que supone el 10 por ciento de sus ventas y Almaverde Bio, que representa el 25 por ciento de las ventas en orgánico.