La cadena italiana Esselunga incrementó sus ventas generales más de un dos por ciento con respecto a 2017. La cadena señala que todos los departamentos, incluidos los frescos incrementaron ventas. Aunque la cadena señala que las ventas fueron peores en el segundo semestre que en el primer semestre.
La cadena señala que el incremento de la facturación se ha hecho sin subir los precios de los productos de mayor rotación, por lo que la cadena espera ver un incremento de la cuota de mercado en la distribución italiana, ya que se ha conseguido a inflación cero.
La cadena italiana es una de las más saneadas y por este motivo se esperan en breve movimiento en el accionariado, ya que Mariana Caprotti, una de las accionistas, tiene la intención de dar batalla para incrementar su paquete de acciones.
