El viento de poniente unido a las fuertes ventiscas que, durante la semana pasada, azotaron Castellón han provocado daños de hasta el 25 % en cultivos de cítricos y hortícolas por la caída de frutos y de hasta el 15 % por rameado.
Así lo han afirmado desde la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), que apunta, en concreto, a naranjas, mandarinas, aguacates y alcachofas entre los cultivos afectados.
Los daños se han producido, sobre todo, en el Baix Maestrat y la Plana Alta, donde se contabilizaron rachas de viento por encima de los 100 kilómetros hora.
El representante de AVA-ASAJA Castellón, José Vicente Guinot, ha indicado que «las cicatrices en la piel a causa del rameado no restan sabor ni calidad organoléptica a la fruta, pero sí suponen a la hora de comercializarla una depreciación comercial».
En el caso de la naranja, el cultivo se encuentra en plena recolección, alcanzando el peso máximo sobre la rama, lo que lo hace más vulnerable a roturas de plantas por el viento.
De momento, desde la organización agraria apuntan que no es posible cuantificar los daños económicos, si bien muestran su preocupación por las posibles pérdidas en cantidad y calidad que puedan sufrir los agricultores de la zona
Por ello, reclaman a las administraciones la puesta en marcha de medidas de apoyo dirigidas a aliviar las pérdidas económicas de los agricultores que han sufrido perjuicios en sus explotaciones, así como una agilización en las peritaciones por parte de Agroseguro.