Agrícola Fran Martos sandía
Frutas

El precio de la sandía de Almería, en caída libre

Así lo ha denunciado la organización agraria COAG, que apunta a la "presión" en los precios de la gran distribución como causante del desplome de las cotizaciones.

COAG Almería ha solicitado a la Agencia de Información y Control Agroalimentario (AICA) la apertura de «una investigación urgente relacionada con la grave situación que se está produciendo entre los agricultores de sandía al inicio de campaña», obligados a trabajar con precios «muy por debajo de los costes de producción actuales».

«La situación está siendo un auténtico desastre», ha manifestado este martes en una nota el secretario provincial de COAG Almería, Andrés Góngora, quien informa de que, «desde principios del mes de mayo, no ha parado de bajar el precio en origen llegando a estar ayer -por el lunes, 8 de mayo- muy por debajo de los costes de producción».

Góngora ha asegurado que la situación es «muy grave» y que la caída de precios ha hecho que éstos alcancen unos «mínimos históricos» en el inicio de temporada. Por ello, asegura que es «urgente que, de una vez por todas, se ponga en marcha la Ley de la Cadena, de verdad nos encontramos ante la situación perfecta».

«Para ello, la Agencia de Información y Control Agroalimentario tiene que abrir ya una investigación porque existe una alta probabilidad de que nos encontremos ante prácticas especulativas por parte de la gran distribución y de las cadenas de supermercados», ha abundado.

Presión de la distribución

Según COAG Almería, estas circunstancias se ven empeoradas por la «presión sobre los precios ejercida por la gran distribución, teniendo además en cuenta el bajo volumen de producción que se espera en este cultivo debido a la extrema situación de sequía que se está padeciendo y al brutal incremento de costes al que se está viendo sometido el sector agrario».

«Creemos que las cadenas de supermercados pueden estar pactando para presionar a la baja, no es normal que al inicio de la campaña ya estemos viendo promociones en determinados lineales, cuando además apenas hay producción», continúa Góngora.

La organización agraria asevera que «los tintes especulativos con los que se tiñe esta situación son bastante llamativos», si se añaden al contexto, además, las altas temperaturas experimentadas durante estas semanas que propician un aumento de la demanda y un consiguiente mantenimiento de los precios en los lineales.

«La AICA tiene que vigilar lo que está ocurriendo a lo largo de la cadena con este cultivo. No puede ser que en nuestras empresas de comercialización estén malvendiendo un producto con un volumen de producción bajo. Algo que, además, tampoco se justifica por las importaciones de terceros países. Esto tampoco es correcto», dice Góngora.

«Sabemos que está entrando producto de terceros países, pero ésta no puede ser siempre la excusa para tirar los precios y hundir al agricultor. Esperemos que la campaña cambie de rumbo, pero ahora mismo la situación es muy grave», concluye.