La producción de la variedad de tomate conocida «Huevo de Toro», autóctona del Valle del Guadalhorce (Málaga), se prevé que aumente y sea excelente durante la presente temporada, según aseguró ayer el presidente de la Asociación de Productores de Tomate Huevo de Toro, José Guerrero.
Este fruto es carnoso, de color rojizo y con pocas semillas, «muy tierno y con buen paladar», según Guerrero, que destaca que «combina perfectamente con la gastronomía local» y que se utiliza en gazpachos, ensaladas o pisto entre otras recetas.
Con motivo de la visita del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, a una de las fincas donde cultivan este producto en la localidad malagueña de Coín y a una cata de estos tomates en esa población, donde se espera un incremento de la cosecha respecto al ejercicio anterior, en el que se llegaron a vender más de 2.400 kilogramos.
«De momento va muy bien, ahora están empezando a salir los primeros tomates; la cosecha va a empezar a finales de julio, ya que tarda entre dos y tres meses en madurar, aunque todo dependerá de las condiciones climatológicas», indica el representante de los cultivadores, que destaca que se trata de un producto muy delicado.
Una de estas tomateras puede llegar a producir siete kilogramos de tomate con un precio de dos euros el kilo. La venta se produce principalmente en comercios locales y en el Mercado agroalimentario del Guadalhorce, en Coín, y no se suele exportar fuera de Málaga debido a que no aguanta trayectos largos.
