Onubafruit continúa inmersa en un proceso de renovación varietal de su superficie de arándano con un doble objetivo: por un lado, ampliar su ventana comercial y, por otro, mejorar la calidad organoléptica y productividad de sus plantaciones.
Para ello, hace años que la cooperativa puso en marcha su propio programa varietal de arándano con el fin, en un primer momento, de adelantar la campaña con producciones desde el mes de noviembre. Sin embargo, desde hace dos años, “también nos estamos focalizando en variedades de estación y tardías”, detalla Carlos Esteve, su director comercial.
Hoy la cooperativa cuenta con seis variedades fruto de ese programa y que suponen ya en torno al 30 % de su superficie de cultivo; pero, es más, “todo lo que vamos plantando son variedades propias”, insiste.
De este modo, si con estos primeros materiales han logrado producir arándano de noviembre a enero, los que vendrán tendrán como objetivo ampliar esta ventana productiva más allá de mitad de junio. “Nuestro programa varietal está en continua evolución”, señala.
Al alza
El arándano es, actualmente, el berry con “mayor proyección”, reconoce Esteve y, de hecho, su producción crece prácticamente en todo el mundo. En Huelva es, incluso, uno de los causantes de la contracción de las hectáreas de frambuesa en los últimos años.
“La inversión inicial es menor, además de ser más barato de producir y mucho menos arriesgado”, detalla Esteve, quien apunta a su “mayor capacidad de crecimiento en ventas”. Y es que, el de la frambuesa, a diferencia de su familiar ‘blue’, es un mercado maduro.
