El impacto de la pandemia de coronavirus pondrá fin al modesto repunte económico registrado en Brasil desde 2017. Crédito y Caución prevé que el PIB se contraiga en el entorno del 5% en 2020, y las exportaciones se deteriorarán un seis por ciento.
Se esperan fuertes disminuciones de la demanda China, USA, Argentina y Europa en los productos agrícolas, excepto en los cultivos de soja. Los principales sectores productivos agrícolas registrarán un aumento considerable del riesgo de impago a sus proveedores y las estimaciones de insolvencia empresarial prevén un brusco crecimiento del 20 por ciento a lo largo del 2020.
En los sectores dependientes de la importación como la tecnología agrícola o el mundo de las semillas hortícolas se verán especialmente afectadas por la depreciación del Real frente al Dólar. Y lo anterior, se une el sufrimiento de la industria turística, pulmón económico de Brasil.
El único punto positivo es que la mayoría de la deuda de Brasil se financia con moneda local, lo que mitiga el riesgo de impago soberano.
