«Estamos exportando 140 millones de dólares solamente en productos agropecuarios a la India», destacó Walker Prieto, al tiempo que reconoció que la cifra es pequeña frente a las exportaciones a China, principal socio comercial de Chile, con el que el intercambio comercial alcanzó los 34.595 millones de dólares en 2017.
Sin embargo, el titular de Agricultura se mostró convencido del «tremendo potencial para seguir incrementando las exportaciones en la India» gracias a un mercado potencial de 200 millones de persona «con un poder adquisitivo muy potente que tienen también gustos más occidentales».
En 2006 Chile e India firmaron un Acuerdo de Alcance Parcial, que entró en vigencia en agosto de 2007 y que abarcaba a 400 productos, y que el año pasado fue ampliado a 2.800 los renglones incluidos en la lista de preferencias arancelarias.
Desde 2007, las exportaciones de productos chilenos, no relacionados con cobre, al país asiático han pasado de 51 millones de dólares en 2006 a 178 millones en 2016.
Walker Prieto, que llegó a Nueva Delhi desde Emiratos Árabes Unidos (EAU), destacó la importancia del acuerdo al tiempo que señaló que ambos países están trabajando en un acuerdo de libre comercio.
«Queremos posicionarnos como un país exportador de alimentos saludables a mercados nichos. Nunca, por nuestra superficie, vamos a ser exportadores de grandes volúmenes», afirmó el ministro en la India, uno de los mayores productores de frutas del mundo.
Según datos de la agencia de comercio exterior ProChile, las exportaciones de fruta fresca chilena a la India alcanzaron los 24,8 millones de dólares en 2017, mientras que, en el primer semestre de este año, estos envíos sobrepasaron los 48,3 millones.
Walker Prieto destacó también la posibilidad de convertir Chile en un país exportador de carne de calidad.
Durante su visita, tras la cual tiene previsto partir rumbo a China, la delegación encabezada por el ministro se reunió con miembros del Instituto Nacional Agrícola indio, para conocer el funcionamiento de las pequeñas explotaciones en el país asiático, donde 120 millones de productores cuentan con menos de una hectárea de terreno.
El objetivo, dijo, es incorporar a la «agricultura familiar campesina a la exportación y ayudarlos a través de la asesoría técnica y con financiación».
