Los que conocen al reelegido presidente de Ejidomar, José Antonio Baños, lo definen como constante. Una constancia sin molestar y sin ruidos. Y es que para estar 14 años al frente de una cooperativa con raíces como Ejidomar, sólo caben estos dos valores.
Baños es el presidente que sabe leer los momentos en el mundo cooperativista. Cuando el melón Galia tocaba a su fin en Almería hace más de 15 años, el ya miraba a la desconocía sandía negra sin pepitas.
Y la miraba para ubicarla en un espacio ‘premium’. Hoy es la segunda categoría en importancia de la cooperativa, tras el pimiento y «la que nos permite tener actividad durante los 12 meses», señala Baños.
Cuando finaliza la actividad de la sandía en octubre, «ya entra el pimiento», recuerda Baños.
Ejidomar siempre ha sido de pimiento California, pero él ha reforzado esta posición de la cooperativa dentro del mercado. De Ejidomar siempre se ha destacado las escasas reclamaciones por parte de sus clientes campaña tras campaña.
Ejidomar cerrará esta campaña 2020 con 15.500 toneladas de sandías comercializadas, 1.000 toneladas menos que en la campaña pasada.
La cooperativa está realizando para esta campaña dos inversiones de referencia. Un nuevo calibrador de pepino y la ampliación de la nave en 4.000 metros cuadrados para los envases de campo.
