La Comisión Europea ha realizado una barrido a primeros de febrero en todos los estados miembros para conocer el grado de correspondencia con las declaraciones de sostenibilidad por parte de industriales y comerciales de la agroalimentación.
El 42 por ciento de los casos investigados no tenían lo suficientemente fundamentado la declaración de sostenibilidad y estaban violando leyes aplicables sobre prácticas comerciales desleales.
La UE ha remitido esta documentación a todos los estados miembros para que pongan en marcha las acciones informativas correspondientes.
La Autoridad Holandesa de Consumidores y Mercados ha sido la primera en recordar que el uso no apropiado de los términos orgánico o sostenibilidad acarrean unas sanciones entre 2,7 y 3,9 millones de euros por empresa.
El organismo de Consumidores y Mercados recuerda que las afirmaciones de ecológicas y sostenibles tienen que ser correctas y así evitar sanciones.