Asprocan, en un comunicado, advierte de que las multinacionales bananeras “siguen tratando de esquivar los aranceles a la importación de la UE, utilizando cualquier tipo de herramienta que se les permita”.
En esta ocasión, un estado miembro presentó hace unos meses ante las autoridades comunitarias una solicitud para que se concediera una suspensión arancelaria a la importación de banana.
Esta suspensión se aplicaría, en principio, en aquellas bananas que -una vez que llegan a puerto- no cumplen con normas de comercialización europeas y están destinadas a uso industrial.
Desde que se conoció la propuesta presentada, los Ministerios de Industria, Comercio y Turismo, y de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno de España, junto con Asprocan y la APEB, trabajaron coordinadamente en la acreditación de los graves riesgos injustificados que suponía aceptar esta solicitud.
Asprocan advirtió de que la aceptación de esta solicitud abriría “una puerta de atrás” para la importación de banana americana sin cumplir con los aranceles comunitarios, dando cabida a la entrada de banana importada sin arancel, que posteriormente podría incorporarse al mercado de fresco sin control, y dando lugar por tanto, a un empeoramiento del ya de por si saturado mercado europeo de banana.
Estos argumentos, según Asprocan, fueron trasladados por España y Francia a la Comisión Europea,que apoyó las motivaciones de los productores europeos.
En consecuencia, en el marco de la negociación de suspensiones arancelarias para el próximo 2022, la Comisión Europea, España y Francia se opusieron a la propuesta presentada, ante lo que el presidente de Asuntos Arancelarios de la UE la semana pasada adoptó la decisión de no aceptar dicha propuesta.
Desde Asprocan se muestran satisfechos con la decisión adoptada en la negociación sobre suspensiones arancelarias, lo que supone “una nueva muestra de un trabajo profesional y coordinado entre el sector y los dos Ministerios. Y viene a demostrar que el sector no es ajeno a los continuos riesgos o iniciativas que disminuyen su competitividad».
No obstante, continúa la nota, hay que seguir atentos porque es una iniciativa que volverá a estar sobre la mesa.
Según Asprocan, a pesar de que los aranceles a la importación de banana a la UE han sufrido un descenso de más del 53% desde 2010, manteniéndose libre de arancel la importación de banana africana y con un arancel de tan sólo 75 euros la tonelada para el resto de países, los importadores multinacionales continúan buscando fórmulas para evitar el pago de aranceles.
El motivo, agrega, no es otro que la fuerte competencia que debido a la saturación del mercado comunitario de banana, ha situado el precio de importación de banana a la UE en mínimos históricos por debajo de los 0,60 euros el kilo y con una caída que acumula ya 6 años consecutivos.
En este contexto, la competencia de la banana en el mercado español es creciente, siendo España el estado miembro de la UE donde menores precios de banana se encuentran, avisan desde Asprocan.