Esta organización agraria ha enfatizado que la comercialización de naranjas verdes sin cumplir las condiciones de madurez requeridas por la normativa comunitaria supone una práctica «imprudente y fraudulenta».
Según Asaja, el consumo de esta fruta en los mercados de destino produce rechazo y esto afecta negativamente a la imagen del producto, de manera que termina por retraer la demanda de los cítricos e incluso la sustitución de los cítricos por otra fruta.
Esta organización pretende trasladar este mensaje al sector en al reunión que está previsto celebrar mañana en Valencia.
Asimismo, la organización ha recordado que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ya ha reforzado el control de las normas de comercialización en la presente campaña de citrícola para impedir precisamente la venta de cítricos que incumplan la normativa europea de comercialización.
En este línea, Asaja-Andalucía ha reclamado reforzar la colaboración con las comunidades autónomas para que puedan realizar las inspecciones y comprobaciones pertinentes en el marco de los controles de verificación de los cítricos con la norma de calidad comercial aplicable.
A su juicio, este control constituye una «importante herramienta» para garantizar que estos productos llegan al consumidor «en el momento más apetecible y en condiciones óptimas de maduración que garantizan su sabor y dulzor».