Así lo ha asegurado el director de la Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajo (Anpca), Luis Fernando Rubio, quien ha lamentado que Agroseguro haya programado además otra nueva subida, también del 20 %, para la próxima campaña.
A su juicio, el productor de ajo no puede permitirse la no contratación del seguro ya que la inversión inicial que realiza cada campaña es muy elevada, de entre 6.000 y 8.000 euros por hectárea.
Rubio ha anunciado que su organización ha solicitado al Ejecutivo de Castilla-La Mancha -principal región productora- la creación de un grupo específico que estudie una posible adaptación de la línea propuesta por Agroseguro a la realidad actual del cultivo.
Ha avanzado que el sector productor pedirá a Agroseguro que «diluya en el tiempo» la subida de la campaña 2020/21 para que los productores puedan asimilarla.
El aumento del coste del seguro se produce tras una alta siniestralidad por la lluvia en la campaña de ajo 2017/18 que disparó las compensaciones de Agroseguro a los agricultores, de acuerdo a sus datos.
España cuenta en la actualidad con más de 25.000 hectáreas dedicadas a la producción de ajo, de las que 19.000 están en Castilla-La Mancha y el resto repartidas principalmente por Andalucía y Castilla y León.
La siembra esta campaña comenzó con las variedades tempranas andaluzas a finales de septiembre y finalizará en la zona centro a mediados de febrero con el ajo morado; las primeras cosechas se prevén para mayo y las últimas para finales de junio y principios de julio.