Cientos agricultores de las principales zonas productoras de frutas y hortalizas del arco mediterráneo se concentrarán el próximo viernes, 13 de diciembre, frente a dos de los principales centros logísticos de la gran distribución alimentaria del norte y el sur de España: Málaga y Barcelona. La organización no precisó si se tratan de Mercamálaga y Mercabarna o plataformas de las cadenas de supermercados en estas dos grandes ciudades españolas.
Los productores de Aragón, Cataluña y La Rioja se manifestarán frente a las instalaciones de un importante centro logístico de Barcelona. Por su parte, productores de Andalucía y la Región de Murcia lo harán en Málaga, en una estratégica plataforma de reparto a grandes superficies, señalan desde la Coag.
El nuevo acto de protesta se enmarca dentro de la campaña de movilización permanente impulsada por COAG para reclamar medidas ante la crisis de precios que azota al sector de frutas y hortalizas durante toda la campaña.
Tras el bloqueo del Puerto de Motril (Granada) de la pasada semana, (para denunciar la entrada fraudulenta de importaciones sin control), ahora el foco se sitúa en las cadenas de distribución. “Exigimos actuar contra la especulación en la cadena de tal manera que los productores podamos vivir del valor de nuestros productos y no quedemos a merced de los intereses de la distribución comercial europea», señalan desde Coag.
Los agricultores «estamos afrontando una presión sostenida en el seno de una cadena alimentaria desequilibrada, que deja importantes márgenes en los eslabones que tienen todo el poder de negociación. Nos imponen precios y condiciones, obligándonos a sacar el producto cualquier precio”, ha subrayado el responsable del sector de frutas y hortalizas de COAG, Andrés Góngora.
Tal y como reflejan los datos recogidos en el Índice de Precios Origen-Destino de los alimentos (IPOD) de octubre de 2019, la campaña se inició con precios en el campo muy por debajo de los costes de producción.
En el caso de la berenjena, el precio medio se sitúo en 0,23€ por kilogramo, mientras que en el lineal el consumidor pagó 1,90€/kg, un diferencial del 726%.
En el caso del calabacín, el agricultor percibió 0,30€/kg y en destino alcanzó 1,55€/kg, lo que supuso un diferencial del 417%. Limones y melocotones registraron unos diferenciales de precios por encima del 500%.