L.P: Qué supone volver a renovar esta certificación?
I.V: «Internamente supone una gran satisfacción. En nuestro día a día nos esforzamos para mantener las pautas obligatorias de calidad y seguridad que este certificado nos exige en todos los ámbitos de la empresa. Actualmente, formamos una plantilla de 110 personas, trabajamos en turnos de mañana, tarde y noche los 365 días del año. Es un bonito reto poder seguir creciendo paulatinamente, formar a los jóvenes y estudiar otros horizontes de negocio. Todo esto no sería posible sin nuestra dedicación por mantener los estándares de calidad.
Volver a ser re-certificados nos motiva para continuar por el camino correcto y nos premia, al ser el OEA la certificación más relevante en nuestro sector».
L.P: Esta certificación la otorgan las aduanas de cada país a las empresas que cumplen con una serie de requisitos fiscales, aduaneros y de seguridad, principalmente, ¿en qué se traduce para sus clientes?
I.V: «Para nuestros clientes, nacionales e internacionales, les seguimos proporcionando garantía pública, confianza en nuestro que-hacer diario y ventajas en las operaciones frente la Administración. Disfrutamos de una mayor velocidad en los despachos aduaneros, ya que hay una disminución del control aduanero, que se traduce en menos inspecciones tanto físicas como documentales, prioridad en los controles, posibilidad de elegir el lugar de la inspección y una mayor facilidad para acogerse a procedimientos aduaneros simplificados».
Más información en el número 19 de la revista Logística Profesional.
