Si bien el embalaje a base de papel de Smurfit Kappa es renovable y reciclable, su proceso de producción en sí consume mucha energía, por lo que alcanzar el citado objetivo refuerza aún más el compromiso continuo de la compañía para reducir su huella de carbono, al centrarse en la eficiencia energética y el uso de fuentes de energía renovables como la biomasa, siempre que sea posible.
Este Informe de Sostenibilidad 2017, que mide el progreso interanual de la compañía en cinco áreas prioritarias: Bosques, Cambio climático, Agua, Residuos y Personas, también anuncia la consecución de otros objetivos clave, que incluyen la reducción en la demanda química de oxígeno en el agua, un hito que también se ha alcanzado tres años antes, o la reducción interanual del 9% en la tasa de frecuencia de accidentes de tiempo perdido durante el período 2013-2017, dentro de su área de salud y seguridad, lo que supera la disminución prevista del 5% interanual para el mismo período.
Asimismo, Smurfit Kappa continúa ofreciendo entregas certificadas para la Cadena de Custodia a sus clientes de Europa y América, cercanas al objetivo del 90%. Sin olvidar que la compañía ha sido destacada en el top 1% de las calificaciones de sostenibilidad EcoVadis e incluida en los sistemas de calificación de inversores FTSE4Good, Euronext Vigeo Europe 120, Ethibel y STOXX Global ESG Leaders.
También hay que destacar el compromiso de Smurfit Kappa con las comunidades en las que opera, donde ha invertido unos 5 millones de euros en proyectos sociales y científicos, poniendo especial énfasis al área de educación infantil.
Tony Smurfit, CEO del Grupo, ha asegurado que “2017 fue otro año con un sólido desempeño en métricas de sostenibilidad para Smurfit Kappa y estoy seguro de que esto continuará en el futuro. En los próximos cinco años planeamos asignar capital significativo a proyectos que contribuirán más a la reducción de nuestra huella ambiental y continuaremos invirtiendo recursos en el desarrollo, la seguridad y el bienestar de nuestra gente. Asimismo, este informe también es una evidencia de que lideramos la industria con transparencia y demuestra cómo Smurfit Kappa está progresando en el apoyo a los Objetivos de Desarrollo de la Sostenibilidad 2030 de la ONU”.
Por su parte, Steven Stoffer, Vicepresidente de Desarrollo del Grupo en Smurfit Kappa, agrega que “para Smurfit Kappa la sostenibilidad no solo trata de mitigar el cambio climático y reducir la ineficiencia. Para que el embalaje sea verdaderamente sostenible, debe ser producido y diseñado de una manera sostenible y ser biodegradable en un tiempo relativamente corto después de múltiples usos. Esto tiene un impacto mínimo en el planeta. El embalaje a base de papel está en una posición única para conseguirlo, por eso apoyamos firmemente la creciente preocupación y los esfuerzos de poner fin a la masa de envases de plástico no biodegradables que flotan en nuestros océanos. Es por ello que creemos que el papel es el futuro del embalaje”.
Principales conclusiones del XI Informe Anual de Sostenibilidad de Smurfit Kappa:
Forestal: todas las fibras son obtenidas de manera sostenible.
Cambio Climático: ya se ha logrado el objetivo de reducir un 25% las emisiones relativas a CO2. La cifra ya alcanza el 26,1%.
Agua: se ha logrado un 37,5% de reducción de DQO sobre un objetivo del 33% que se había marcado para 2020.
Residuos: reducción del desperdicio enviado a vertedero un 13,3% desde 2013.
Personas: se ha reducido un 9% la tasa anual de frecuencia de accidentes de tiempo perdido entre 2013 – 2017.