Quintero, en una nota de su departamento, ha indicado que el objetivo del Gobierno de Canarias es que los agricultores sean los beneficiados de esta subvención, con una reducción en el coste del agua que pagan «y así lo hemos incluido en el decreto que regulará la concesión de estas ayudas».
La nota recuerda que esta ayuda es consecuencia de la negociación de los presupuestos generales del Estado de 2017, y está siendo transferida en estos días a la Comunidad Autónoma, por lo que ante la cercanía del final de año deberá ser gestionada durante el primer trimestre de 2018.
El objetivo es abaratar para el agricultor el precio final del agua de riego, en términos de coste energético, elevada desde pozos o producida en las plantas potabilizadoras.
El objetivo de la Consejería, ha indicado el director general de Agricultura, César Martín, es que la totalidad de los seis millones destinados a esta línea de ayudas «sea repartida, por lo que se ha incluido en la propuesta que si en algún grupos no se agota en su totalidad, la cantidad restante será destinada a aumentar el resto de los grupos».