Suiza está viviendo un cambio en el rol de la mujer en la empresas productoras, ya que el 36 por ciento de los propietarios de fincas hortícolas pertenecen al género femenino.
Este porcentaje es mucho mayor que la media del sector agrario, donde el 22 por ciento de los propietarios son mujeres. Este dato no es tan nuevo, ya que «la proporción de mujeres en la producción de hortalizas siempre ha sido mayor que en el resto de los sectores agrarios», desvela Petra Sieghart, directora de Agriprof.
La propia directora de este colectivo señala que «hoy conozco más horticultoras al frente de sus granjas, mientras que hace 10 años eran muy pocas las mujeres que estaban al frente de la explotación».
No obstante, el relevo generacional no se encuentra garantizado porque los actuales productores «aconsejan a sus hijos que consigan otro tipo de actividad o un segundo trabajo y este comportamiento se nota en los diferentes cursos de formación que contempla la administración suiza», desvela Sieghart.
De hecho, «hay una mayor proporción de estudiantes de agronomía que no vienen de tradición agrícola, y son los que muestran más interés en la actividad», apunta Loïc Bardet, presidente de la Organización Mundial del Trabajo en la Agricultura.
Actualmente, existen unos 3.900 aprendices que se están formando en las distintas escuelas agrarias presentes en Suiza. Esta cifra se encuentra estabilizada con respecto a 2022, rompiendo la tendencia al alza de años anteriores.
