Logofruits se ha convertido en el mayor productor de arándanos de Portugal y uno de los mayores de Europa tan solo cinco años después de su nacimiento.
Además de cultivar y envasar fruta para famosas cadenas de supermercados en el norte de Europa y España, Logofruits también presta hoy sus servicios de envase a mayoristas de Sudamérica y Sudáfrica. Y es que su negocio sigue creciendo.
De cara al 2024, su sexta temporada, la producción en su planta de envase ubicada cerca a Alcácer, pasará de uno a dos turnos.
Esta historia de éxito fulgurante es el resultado de la visión y los estrictos estándares del fundador y socio director de la empresa, Lourenço De Botton. Empezó con un terreno de tan solo 15 hectáreas, y aunque los inicios fueron modestos, él ya pensaba en grande. Tras analizar los retos y las oportunidades del sector de los arándanos y visitar otras plantas de envase de arándanos para ver cómo se hacían las cosas, tomó dos decisiones importantes.
Una de ellas fue invertir en una línea de envase de TOMRA Food en sus propias instalaciones de forma que pudiese preparar su fruta para su exportación desde Portugal y sin necesidad de recurrir a terceros.
En noviembre de 2022, se preparó para la temporada de 2023 instalando soluciones de TOMRA Food a la vanguardia del mercado. Así, en la planta de Alcácer, se incorporó el sistema de calibrado de precisión KATO260 de TOMRA con inteligencia artificial LUCAi™ y dos sistemas de llenado CURO.
La otra decisión importante fue posible gracias a la primera: añadir un nuevo flujo de ingresos utilizando también equipos de TOMRA para clasificar y envasar arándanos de empresas sudamericanas (de Chile y Perú) y sudafricanas que querían vender en Europa. Y es que la planta de Alcácer de Logofruits, situada en el municipio de Setūbal, 95 kilómetros al sur de Lisboa, está cerca de las principales carreteras y puertos de exportación de Setūbal y Sines.
Aquí, el terreno de 15 hectáreas creció rápidamente hasta las 90 hectáreas. Tras esto, llegó la compra de una segunda finca de 70 hectáreas situada más cerca de Lisboa para ampliar la temporada de producción y cosecha de la empresa.
De Botton explica: “Esperamos que la demanda siga creciendo durante los próximos años, pero también prevemos mayores dificultades para los pequeños productores. Con el tiempo, este segmento irá adquiriendo una escala industrial, y el control de costes será mucho más importante de lo que ya es. Esto convierte la tecnología en uno de los factores más importantes para nuestra empresa, no sólo en el campo, sino también en nuestra planta de envase. Evaluamos el mercado de forma exhaustiva, así como las distintas soluciones técnicas disponibles antes de invertir en equipos. Esta investigación nos demostró que Logofruits y TOMRA encajaban como un guante”.
Preguntado por lo útiles que han sido las soluciones de línea de TOMRA, De Botton responde sin dudar: “Son revolucionarias”.
Sistema de clasificación KATO260
KATO260 es el sistema de clasificación y calibrado de precisión de arándanos líder del sector. Este versátil sistema, compacto para minimizar los requisitos de espacio, está diseñado para manipular la fruta de forma delicada con vistas a maximizar la retención del bloom y el período de conservación, lo que lo convierte en el producto ideal para cualquier situación de clasificación de fruta.
El sistema KATO260 cuenta con cinco o siete salidas y permite tanto clasificar la fruta en distintos tamaños como eliminar la fruta defectuosa con gran facilidad en plantas de envase de cualquier tamaño.
Un volcador automático de cajas (Tray Tipper) carga la fruta de forma delicada en el sistema KATO260, lo que garantiza un suministro constante e incluso una distribución uniforme de los arándanos en el sistema de clasificación, optimizando la producción.
Seguidamente, el exclusivo sistema de cintas transportadoras de KATO260 separa y va girando los arándanos para permitir una inspección completa de la superficie. Las cámaras toman múltiples fotografías de cada pieza de fruta y el software de la máquina puede identificar defectos de hasta 0,2 mm para lograr un calibrado de máxima precisión.
Además de una máxima calidad, este sistema es increíblemente rápido: puede clasificar hasta 286 ó 572 arándanos por segundo en el caso de que trabajen dos KATO260 a la vez.
Un valioso complemento opcional para el sistema KATO260 es un paquete de software y hardware llamado LUCAi™, que emplea inteligencia artificial para clasificar y calibrar fruta con una precisión sin precedentes. Después de que cada pieza de fruta pase por la línea de calibrado, es fotografiada por varias cámaras; seguidamente, LUCAi™ indica cómo debe clasificarse cada arándano. LUCAi™ es capaz de procesar hasta 2.400 imágenes por segundo y ver la fruta en longitudes de onda invisibles para el ojo humano para detectar los defectos más sutiles, como deshidratación, golpes y antracnosis temprana.
Al final de la línea de Logofruits, la fruta llega al sistema de envase CURO16, con 16 estaciones de llenado, o al sistema CURO12, con 12 estaciones de llenado.
Esta máquinas aumentan la productividad al reducir los errores de manipulación humanos y el desperdicio de fruta, pesando con una precisión de 1-2 arándanos por envase. Además, puede envasar de forma simultánea para distintos mercados.
El sistema CURO16 es la opción de llenado por peso más rápida del mercado, capaz de procesar 200 envases de 125 gramos de fruta por minuto, mientras que su hermano pequeño, el sistema CURO12, puede procesar 150 envases por minuto. Las transiciones mínimas de la línea de clasificación garantizan una manipulación delicada de la fruta en su camino hacia sus envases.
Acceso a nuevos mercados
El director de la planta de envase de Logofruits en Alcácer, Miguel Silva, coincide con Lourenço De Botton en que los equipos de TOMRA han sido transformadores. Recuerda: “Antes de adquirir estas máquinas, despachábamos casi toda nuestra fruta a nuestros socios en Holanda para que la envasaran para los distintos mercados europeos. En Portugal, únicamente envasábamos productos para el mercado nacional, y lo hacíamos a mano. Con los nuevos equipos, conseguimos controlar la calidad de nuestro productos y establecer nuestros precios. Podemos controlar la calidad hasta el mínimo detalle.”
“El sistema KATO nos permite clasificar por tamaño, dureza y forma, es decir, según la redondez u ovalidad de la fruta. De esta forma, evitamos que el producto sea rechazado por los clientes. Hemos reducido los rechazos casi a cero. Podemos satisfacer las especificaciones individuales de cada cliente colocando exactamente la fruta que queremos en cada palet o caja. Y con los sistemas CURO 12 y 16, obtenemos múltiples formatos, gestionando dos pedidos distintos al mismo tiempo”.
De Botton concluye: “La calidad de nuestro producto es ahora sistemáticamente excelente, lo que reforzará nuestra reputación y mejorará nuestras ventas. Ya podemos satisfacer las necesidades de los mercados que hasta ahora se nos resistían, abriendo la puerta a nuevas ventas. Y nuestra relación con TOMRA es excepcional. Esta es una magnífica alianza entre usuario y proveedor que nos ayudará a seguir avanzando”.