Ecofel, la Asociación de Organizaciones de Productores de Tomate de Francia, AOPn Tomate de France, la holandesa DPA y la española Fepex han demandado a la CE que «actúe en lo que respecta al incumplimiento y la no aplicación de las medidas previstas en el Acuerdo UE-Marruecos».
Fuentes de Fepex han explicado en un comunicado que han dirigido la misiva a la presidenta de la Comisión, Ursula Von der Leyen y a los comisarios Valdis Dombrovskis (Comercio), Stella Kyriakides (Salud) y Janusz Wojciechowski (Agricultura y Desarrollo Rural).
En la carta, han reclamado a Bruselas que modifique el método de cálculo utilizado para obtener el valor de importación de tomates de Marruecos, usando solo los precios de los tipo «redondos», y que aplique adecuadamente la cláusula de cooperación y la medida de salvaguardia para tener una efectiva aplicación del acuerdo.
Han solicitado que se celebren consultas con las autoridades marroquíes para garantizar que se alcancen los objetivos previstos en el protocolo del pacto, que se supervise el pago de los derechos ad valorem y que se adapte la cuota asignada de tomate a Marruecos tras la retirada del Reino Unido de la UE.
También, que se precise, normalice y audite la forma de recogida y cálculo del precio de los tomates marroquíes en la UE, con el fin de que los precios del valor de importación a tanto alzado comunicados por los Estados miembros reflejen con exactitud la realidad de los mercados comunitarios.
Por último, han solicitado que se monitoreen las importaciones de tomate del Sahara Occidental mediante análisis de isótopos y que la Comisión solicite un etiquetado especial para evitar el fraude de origen en la comercialización de este producto en el mercado europeo.
La secretaria de Eucofel, Alba Ridao-Bouloumié, ha defendido -según Fepex- que «con su inacción y pasividad, la CE contribuye activamente a la muerte del sector del tomate de la UE», cuya situación es «dramática» por entrada de producto desde Marruecos.
El director de Fepex, José María Pozancos, ha subrayado que el aumento constante de las importaciones de tomates marroquíes, que sobrepasa la cuota de entrada asignada de 285.000 toneladas, está provocando graves perjuicios a los productores comunitarios sin que se aplique la medida de salvaguardia prevista en el acuerdo.
El president e AOPn Tomate de France y vicepresidente de Eucofel, Laurent Bergé, ha insistido en que se adapte la cuota de entrada de tomate marroquí tras el Brexit, ya que se mantiene mientras que Reino Unido ha concedido a Marruecos tras su salida de la UE una cuota de 47.510 toneladas.
Win Rodenburg, de la asociación DPA, ha incidido en que el origen de los tomates cultivados en el Sáhara Occidental ha de ser controlado y debe contar con un «etiquetado especial» para distinguirlo del de Marruecos y evitar «un fraude» que su organización «condena enérgicamente», han apuntado desde Fepex
