Piedra ha hecho un balance del desarrollo de la campaña hasta estos momentos, en que se encuentra en su ecuador y entrando en los meses de mayor volumen de recolección, indicando que el volumen de producción a estas alturas es prácticamente similar al del año pasado y los precios se sitúan en una media de un 5 por ciento por debajo.
Sin embargo, ha remarcado, si hay algo que este año esté caracterizando a la campaña de la fresa es «la excepcional calidad» de la fruta que «ha respondido bien al problema de vegetación que tuvo lugar allá por septiembre» y se ha recuperado gracias a que «no ha habido períodos de humedad y lluvia».
También se ha referido a la mano de obra, una de «las principales inquietudes» de los agricultores, máxime en un momento en el que se produce «la tormenta perfecta» al «incrementarse bastante la producción de la fresa, comenzar a producir los arándanos, frambuesas y moras y empezar a realizarse contratos en el sector turístico con la llegada de la Semana Santa».
Piedra ha destacado el «esfuerzo» realizado por las organizaciones agrarias para traer mano de obra contratada en origen desde Marruecos para paliar todo lo posible los problemas que puedan ocasionarse.
Con respecto a este contingente, ha explicado que la primera y segunda fase de mujeres, repetidoras de más de dos años, está cubierta casi al 100 %, ya que hay unas 300 que finalmente no han venido.
A partir de mañana, debería de comenzar la fase tres, que incluye un primer grupo de casi 7.000 marroquíes repetidoras del año pasado y 7.500 nuevas; la llegada del primer grupo se va a retrasar una días, según ha indicado, debido a que se prevé el cierre de las conexiones marítimas por temporal entre el 21 y el 26 de marzo.
