El ministro de Finanzas de Holanda, Wopke Hoekstra, ha iniciado una cruzada para que las frutas y hortalizas bajen sus precios en los supermercados a partir de 2023.
Y esta medida se toma tras el estudio realizado por los altos funcionarios de la Secretaría de Estado de Finanzas desde el noviembre pasado.
Ya desde 2018 se están haciendo estudios con la carne y los lácteos y el presidente de esta Comisión, Pier Vellinga, se muestra encantado de que la clase política le tenga en cuenta.
La Comisión tiene claro que las frutas y hortalizas tienen que ser más baratas para que los holandeses con menos ingresos puedan mejorar su alimentación.
Según la propuesta, cualquiera que coma más frutas y verduras y menos carnes se verá beneficiado.
Además, dice la Comisión, que comiendo más frutas y verduras se reducirá el costo de la Sanidad holandesa.
La Comisión señala que facilitando el consumo de frutas y hortalizas se reducirán en un 7,6% los pacientes de diabetes; el número de accidentes cerebrovasculares en un 3% y el cáncer de colón en un 2,9%.
