El centro, que tiene como objetivo adaptar la oferta del grupo a los hábitos y preferencias del consumidor portugués, se suma a las 13 instalaciones de este tipo que la cadena tiene en España y cuenta con 1.000 metros cuadrados distribuidos en dos plantas.
Según el ministro, la llegada de Mercadona a suelo luso supone «un enorme incentivo a la entrada de productos portugueses en España» y recordó que en 2016 la empresa compró 56 millones de euros en productos a compañías lusas.
Caldeira Cabral estuvo acompañado durante la visita por el secretario de Estado de Comercio, Paulo Ferreira; la secretaria de Estado de Industria, Ana Teresa Lehmann, y el alcalde de Matosinhos, Eduardo Pinheiro.
Mercadona anunció el año pasado que abrirá cuatro supermercados en Portugal en 2019, los primeros fuera de España, que contarán con una inversión de 25 millones de euros y crearán 200 puestos de empleo.
