García Tejerina ha defendido en el Congreso la sección del proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) correspondiente al Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama), que incluye una dotación consolidada de 9.649 millones de euros (+1,78 % anual).
El proyecto legislativo destina 211 millones a financiar los seguros agrarios, el mismo importe que en 2017 y 2016, pero Tejerina ha afirmado que la partida es «ampliable» y si es necesario aumentará el crédito.
El apartado de seguros es uno de los que más cuestionan los partidos y las organizaciones del sector.
El PGE destina 7.511 millones a las políticas de «Agricultura, Pesca y Alimentación», un 1,3% más.
La dotación para infraestructuras del Ministerio alcanza 1.617,7 millones, un 3,5% más; las subvenciones a la producción y al mercado agrario con aportaciones de la UE ascenderán a 5.800 millones.
Asimismo, el Ministerio dispondrá de 1.234 millones para desarrollo rural, un 1,7 % más, 56 millones para pesca (estables) y 83 contra los incendios forestales.
La ministra ha asegurado que los presupuestos permitirán mejorar el funcionamiento del sector agroalimentario y su comercialización, avanzar hacia el cumplimiento de objetivos ambientales y dar continuidad a las políticas de pesca, en las que España es un «referente».
El PSOE, Unidos Podemos, ERC y el Grupo Mixto (PdCtat y Compromís) han criticado estas cuentas; Ciudadanos las ha celebrado y el PNV no ha intervenido en el debate.
Desde el PSOE, el portavoz de Agricultura en el Congreso, Manuel González Ramos, y el portavoz de Pesca, Miguel Ángel Heredia, han subrayado que son presupuestos «cortos».
González Ramos ha lamentado el rechazo del PP y de Ciudadanos a sus enmiendas, para dotar más a los seguros, a la incorporación de jóvenes o a la lucha contra la despoblación.
El portavoz de Agricultura de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, Antón Gómez-Reino, ha manifestado que el presupuesto para agricultura y pesca es una «vergüenza», su incremento está basado en cifras «falseadas» sobre la previsión de ingresos y, a su juicio, al PP «no le importa el medio rural ni sus sectores».
Por el contrario, el portavoz agrícola de Ciudadanos, Miguel Ángel Garaulet, ha argumentado que el PGE incluirá mejoras como la rebaja de impuestos, la subida de las pensiones e incluso ha citado la equiparación salarial de la Guardia Civil -que ha atribuido a su partido-, por la importancia de este cuerpo para el mundo rural.
Ascensión Carreño (PP) ha criticado la falta de fiabilidad de la oposición en las más de 1.137 enmiendas presentadas, muchas «inviables» e incluso ha llamado «aprovechategui» al representante de Ciudadanos, que «parece hablar como un diputado popular».
Xavier Eritja (ERC) ha señalado que el campo sigue «perdiendo peso» y que «el Estado español ha renunciado a hacer políticas agrarias propias».
Desde el Grupo Mixto, Antoni Postius (PdCAT) ha rechazado las cuentas, mientras que Enric Bataller (Compromís) ha añadido que «van a peor», con ejemplos como la desestimación de una enmienda para el Instituto Valenciano de Investigación Agraria (IVIA), que hubiera costado «un tercio», de las que el Gobierno ha aceptado para las «barandillas» de la playa de la Concha en San Sebastián.
