La ciudad de Cape Town es la primera de las grandes metrópolis sudafricanas que está cerca del colapso por falta de agua y esto va a provocar importantes consecuencias en los cultivos hortofrutícolas, sobre todo, en el aguacate. La situación es de emergencia y el aguacate vería reducir drásticamente sus riegos a nivel de subsistencia para salvar la arboleda.
La normativa sudafricana establece que cuando los embalses se encuentren al 13 por ciento se deben cortar los suministros de agua para los cultivos y ahora mismo el nivel medio de los embalses se encuentran al 20 por ciento, siete puntos por encima de esta psicológica cifra. Nadie quiere hacer comentarios, pero todos los proyectos de expansión de nuevas plantaciones de aguacate se han paralizado.