La petición, realizada por el grupo de Contacto de Ajo que conforman los productores y comercializadores de España, Francia e Italia, viene acompañada de la solicitud de un mayor control en las aduanas para controlar la entrada de ajo congelado chino, especialmente en la frontera de Bélgica.
La situación a la que se enfrentan los productores españoles ya preocupa al sector, porque este cultivo ha visto reducida su superficie de siembra en más de un 17 %, según los datos de Agroseguro.
Destaca Andalucía, la comunidad autónoma con un mayor descenso de superficie de siembra con un 42 % menos, con respecto a la anterior campaña.
Esta reducción en la superficie de siembra, la sequía y los problemas fitosanitarios que experimenta el cultivo del ajo, harán que la cosecha de la presente campaña sea bastante inferior a la pasada, que ya fue baja, según prevén.
Durante una reunión que el grupo ha tenido esta semana en la localidad vallisoletana de Peñafiel, los participantes han expuesto los resultados del informe elaborado por la Mesa Nacional del Ajo sobre las presuntas irregularidades en las importaciones de este producto.
Por ello, los productores han pedido más controles en las fronteras, y han demandado que se estudie la posibilidad de crear un código Taric específico para el ajo congelado.
