Bajo el paraguas de esta IGP, que aglutina 80 socios productores, están las empresas comercializadoras Girona Fruits, de Bordils; Fructícola Empordà, de Sant Pere Pescdor y Giropoma Costa Brava, de Ullà.
Durante la feria, que ha reunido a más de 1.600 empresas expositoras y 70.000 profesionales de 120 países, el director de la estación experimental IRTA Mas Badia, Joan Bonany, destacó las medidas que ha implantado la IGP, en colaboración con este centro de investigación, para obtener una manzana más sostenible. Bonany explicó el nuevo sistema de gestión hídrica que ha permitido reducir un 25% el consumo de agua de los manzanos gracias a más de 400 sensores que determinan las necesidades de agua del árbol en función de la previsión meteorológica de los próximos siete días. También dio a conocer los métodos alternativos a los fitosanitarios que ha adoptado la IGP para controlar plagas y enfermedades, como el uso de trampas con feromonas o los sistemas de confusión sexual, y destacó la importancia que tiene la biodiversidad para controlar plagas como la del pulgón o la polilla del manzano.
Actualmente, en la demarcación de Girona hay 2.284 hectáreas de manzanos, de los que el 84% (unas 1.700 hectáreas) forman parte de esta IGP. Poma de Girona cultiva cinco variedades entre las que se encuentran la Gala, Golden, Fuji, Red Delicious y Granny Smith que se cultivan en las comarcas del Baix Empordà, Alt Empordà, la Selva y el Gironés.