Luengo, que ha visitado la Aduana de Murcia junto al presidente de la Cámara de Comercio de Murcia, Miguel López Abad, ha remarcado que el 62 % de toda la exportación de la comunidad al mercado británico es de productos hortofrutícolas.
Esta producción, salvo los cítricos, deberá tener un certificado fitosanitario y un sistema de prenotificación en destino desde el 1 de abril de este año, mientras que desde el 1 de julio se intensificarán los controles, que se incrementarán en la aduana en más del 50 % respecto al número actual.
Este aumento, tanto en origen como en destino, es «imposible» de afrontar con el personal de la comunidad, según ha reconocido Luengo, por lo que ha reclamado al Ministerio de Agricultura el aumento de los inspectores y plantilla de la aduana de Murcia.
Tras afirmar que el Gobierno central no ha respondido a sus peticiones, el consejero ha advertido de que esta situación puede repercutir «muy negativamente» en las exportaciones hortofrutícolas de la Región de Murcia, que representaron 480,8 de los 770,9 millones de euros facturados por empresas murcianas entre enero y octubre de 2020.
La Aduana de Murcia, gestionada por la Cámara de Comercio de Murcia, se instaló en el Centro Integrado de Transportes en 2009, y que en sus tareas aduaneras participan también la Guardia Civil, el Departamento de Aduanas de la Agencia Estatal Tributaria, el Servicio de Sanidad Vegetal del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y los servicios de Sanidad Exterior y de Calidad Comercial del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
