Abarcan la mejora de la utilización de los recursos hídricos, la evitación de pérdidas en redes de distribución y el fomento del almacenamiento de agua, incluido el cubrimiento de embalses para evitar evaporación.
Dirigidas a las comunidades de regantes, podrán ser solicitadas igualmente para canalizaciones, automatización y mejora de la eficiencia energética.
Una segunda orden publicada regula la convocatoria de subvenciones para la construcción de balsas.