«Aunque solo alrededor del 1 % de las especies de trips son perjudiciales para los cultivos, se cuentan entre las plagas que producen más pérdidas económicas en la agricultura en todo el mundo —explica Simon Foster, especialista en MIP y Polinización de Biobest—. Son un problema grave, debido a su amplia distribución, sus hábitos polífagos, su tasa de reproducción inusualmente alta, su rápido crecimiento y su capacidad de desarrollar resistencia a los pesticidas rápidamente. Además, algunos son portadores de fitovirus, especialmente del género tospovirus».
Señales y síntomas
Los trips producen daños en las cosechas al alimentarse y al poner huevos (oviposición). Cuando se alimentan, dañan los tejidos superficiales con su aparato bucal raedor-chupador.
«En los tejidos en crecimiento activo, los trips al alimentarse reducen el área foliar y producen deformaciones, retraso en el desarrollo, una excesiva ramificación vegetativa e incluso la muerte de los nuevos tejidos apicales —explica Simon—. En las hojas completamente desarrolladas pueden causar daños estéticos. Y las pérdidas económicas de mayor gravedad se deben a su condición de portadores de fitovirus.
»Las ninfas y los adultos a menudo se ocultan en los capullos de las flores o en hojas jóvenes plegadas. Son difíciles de detectar, de ahí la importancia de colocar trampas adhesivas para el seguimiento. Es fundamental situar las trampas cerca del cultivo, ya que los trips no son buenos voladores».
Hospedadores de la plaga
Algunas especies de trips, como Frankliniella occidentalis, Thrips tabaci y Thrips palmi, son plagas globales que dañan cultivos muy diversos, que abarcan hortalizas, bayas, hierbas, plantas medicinales, plantas ornamentales y frutas.
«En cualquier cultivo, la clave está en una prevención (sumada a diversos métodos de control con modos de acción variados) orientada a diferentes etapas de su ciclo vital» —afirma Simon.
Aspecto
Los trips adultos son insectos pequeños y delgados con alas con flecos —que mantienen desplegadas cuando están en reposo—, y su color varía desde amarillo pálido hasta casi negro.
«La identificación se basa en características microscópicas, como la segmentación de las antenas, y a menudo es recomendable dejarla en manos de un experto. En cualquier caso, es importante identificarlos porque cada especie requiere una solución diferente» —dice Simon.
Ciclo de vida
Por lo general, insertan los huevos en los tejidos de las plantas. En los primeros estadios ninfales no tienen alas, pero se alimentan activamente de los cultivos, mientras que en las etapas de pupa y prepupa no son activos y no se alimentan.
Los machos se desarrollan a partir de huevos no fertilizados (la proporción entre machos y hembras depende de factores como la densidad y la temperatura). Su impresionante velocidad de desarrollo varía en función de la temperatura, el tipo de cultivo y los recursos disponibles.
Soluciones
Las estrategias de control de los trips, para tener éxito, dependen de la detección temprana con trampas adhesivas, la liberación de macroorganismos de control biológico (incluyendo ácaros e insectos depredadores), el uso de depredadores en el sustrato para controlar las etapas de pupa y prepupa y la aplicación de biopesticidas microbianos, todo ello sumado al hecho de que es mejor prevenir que curar.
Biobest tiene una extensa gama de productos para control de trips, incluyendo las trampas adhesivas Bug-Scan®, Amblyseius-System, Montdorensis-System, Orius-System y Hypoaspis-System.
Además de estas soluciones principales, Biobest ofrece una amplia variedad de productos complementarios para el control de esta plaga, como Swirskii-System, Chrysopa-System y Atheta-System, así como nematodos beneficiosos (Steinernema-System) y la feromona ThriPher para detectar los trips de las flores.