No está siendo una campaña sencilla para los productores de fruta de hueso ni para los comerciantes ni supermercados. Hay más oferta que en la campaña pasada, pero los calibres pequeños abundan.
Esta situación provoca fuertes diferenciales de precios entre las cestas de un kilo con pequeños calibres y la fruta de hueso a granel en todos los lineales europeos.
Las cestas se ofrecen a precios accesibles y con promos por debajo de los 2 euros, mientras que la fruta de hueso a granel se ofrece casi rozando los cuatro euros y hasta por encima de los cinco euros en los mercados de España y Francia.
El escenario es el mismo en las tres zonas de producción del sur de Europa y, sobre todo. en Lleida, donde las condiciones de falta de agua y humedad ambiente han provocado un exceso de pequeños calibres.
No hay estimaciones aún, pero algunas empresas tienen más del 50 por ciento de las piezas en el calibre C, lo que condiciona los programas con las cadenas.
De hecho, el ritmo de demanda no es especialmente alto a pesar de que los pequeños calibres ofrecen precios interesantes a los consumidores. Y para más complicación, el precio de los grandes calibres está disparado, lo que dificulta la salida al mercado.