La oferta de canónigos se ha reducido en las últimas semanas desde que ha desaparecido la oferta germana y está provocando un proceso inflacionista sobre la categoría.
Las lluvias elevadas de noviembre y la ola de frío provocó que las tareas de recolección se hayan suspendido en diciembre y se haya dado la campaña por finalizada.
Las principales regiones productoras de todo tipo de hoja frenaron su proceso de recolección y los precios en los mercados mayoristas se han disparado.
El canónigo que está entrando actualmente en Alemania es de origen belga y debido al incremento de los precios, la proporción de los hogares que ha aumentado su demanda es muy limitada.
Sólo el 1,5 por ciento de los hogares germanos adquirieron canónigos durante la semana pasada con un precio aumentado en casi un 9 por ciento. Hoy, el canónigo se encuentra a un precio de 10,28 euros por kilogramo, según la consultora AMI.