Además, un 11 por ciento se decanta por el suelto y un 31 por ciento por ambos. La juventud es en parte responsable de esta tendencia.
Los tamaños de tomate también influyen. El estudio recuerda que el 42 por ciento de los germanos a la hora de comprar esta hortaliza se decanta por los pequeños; el 14 por ciento prefiere los grandes y el 38 prefieren ambos.
Con respecto al volumen de compra de tomate, el 71 por ciento de los consumidores alemanes no compra más de 500 gramos, una cifra muy similar a los británicos (73 por ciento). Además, los germanos adquieren tomate de diferentes tipos. En concreto, un 54 por ciento y en un 81 por ciento adquiere los tomates en los establecimientos donde compra otros productos de alimentación.
Los mayores consumos de tomate se registran en los hogares de los jubilados, mientras matrimonios recientes consumen por debajo de la media.