La entidad ha detallado que este resultado supone un 12 % más que lo registrado entre enero y junio de 2021 (458 millones) y un 25 % más que en 2020 (353 millones).
Unas cifras que constatan, según han señalado, el aumento de los fenómenos meteorológicos «cada vez más adversos y graves durante la última década».
Todo ello, ha dado lugar a ratios de siniestralidad por encima del equilibrio en cinco de los últimos seis años.
En este sentido, los daños ocasionados por la helada de abril suponen prácticamente la mitad de la indemnización total hasta el 30 de junio, con 244 millones.
También las tormentas de pedrisco han provocado daños sobre los cultivos por valor de cerca de 70 millones de euros.
Las producciones de frutales son las que presentan los mayores daños, con una estimación de más de 240 millones y con Cataluña y Aragón como principales zonas afectadas.
Los últimos meses del semestre, mayo y junio, han registrado «temperaturas excesivamente altas» que han afectado fundamentalmente a los cultivos herbáceos.
Unas temperaturas que han avivado los incendios activos durante estos días en todo el país y del que también cubrirán sus daños el seguro agrario para los productores con póliza, según explicó el pasado martes el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas