Las estaciones de servicio españolas piden servicios mínimos para salvar empresas y empleos, ya que el nivel de demanda se ha reducido al 10 por ciento de lo habitual y más de 11.000 estaciones de servicio están obligados a permanecer abiertos todos los días.
Las estaciones de servicio «somos consideradas un servicio esencial y, como tales, estamos obligadas a permanecer abiertas y seguras si tienen aseos que pueden utilizar los transportistas y que nuestro personal desinfecta periódicamente aún a pesar de la falta de medios que sufrimos», señalan desde la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES).
Desde este colectivo se ha solicitado «unos servicios mínimos que garanticen el adecuado abastecimiento de carburante de los servicios esenciales, al tiempo que permitan a las estaciones de servicio que así lo deseen cerrar temporalmente sus negocios hasta que España recupere la normalidad que ahora ha perdido a causa de la propagación del coronavirus», señalan desde CEEES.
El colectivo afirma que sus demandas «han caído en saco roto y la administración ha desoído nuestras peticiones». La no puesta de servicios mínimos puede provocar «cerrar la persiana definitivamente» de muchas estaciones de servicio.
