Las empresas de Murcia tienen motivo para estar desanimadas y en un estado anímico por los suelos. El grueso de las empresas de Murcia que tienen en el brócoli y en la hoja sus productos de referencia cerraron enero con una facturación un 50 por ciento menor que en el mismo enero de 2017 y moviendo un 40 por ciento más de oferta que hace un año.
Es cierto que hace un año, Murcia vivió una crisis meteorológica que provocó un descenso considerable de la oferta y un fuerte incremento de la facturación. Un año más tarde la situación es bien distinta, pese a la escasez de agua, pero «la mayoría de los horticultores murcianos han elevado sus plantaciones de brócoli y hoja, creyendo que iba a ver un descenso de la oferta y desabastecimiento a la clientela», señala Mariano Zapata, presidente de la sectorial de subastas de Proexport.
Las empresas de brócoli y lechuga iceberg y romana son las que más están sufriendo esta situación económica y financiera. Algunos empresarios anuncian abiertamente que los bancos tendrán que trabajar durante la presente campaña, ya que el año no se salva.