El cultivo de brócoli en España cerró con una oferta de 527.000 toneladas durante 2017, lo que supone un incremento del 10 por ciento con respecto al ejercicio anterior. La campaña de brócoli está siendo especialmente complicada en las liquidaciones, por lo que este incremento de la producción explica las bajas liquidaciones.
La campaña está siendo nefasta con subastas centradas únicamente en brócoli en circunstancias de muchas dudas sobre su futuro e incluso algún movimiento empresarial enfocado en fusionar alguna empresa, aprovechando la debilidad financiera.
Aún no existen datos de superficie ni de exportación, pero la campaña 2017-2018 verá incrementada sus expediciones, mientras que el valor económico ha descendido más del doble.
Este incremento de la oferta en un 10 por ciento responde a la iniciativa de algunas empresas de Murcia de ubicar plantaciones de brócoli en Extremadura, Cataluña y Andalucía Occidental, ante el temor de que la disponiblidad de agua fuese menor.
Este escenario no se ha llegado a producir y ahora acucian los problemas para las empresas que entregaron plantas a cuenta a horticultores de estas zonas, que no efectuarán sus pagos, ya que las liquidaciones no han cubierto los costes de las plantaciones.
